El rediseño de la imagen corporativa de esta empresa minera nace con un propósito claro: actualizar su identidad sin perder la solidez de sus raíces. La nueva marca debía reflejar experiencia, sostenibilidad y precisión técnica, valores que definen su trayectoria en el sector.
El logotipo, inspirado en las formas minerales y la estructura del terreno, combina geometría y equilibrio visual. Su lenguaje visual transmite robustez y claridad, mientras los tonos grises y verdes evocan la conexión con la tierra y el paisaje de Tarragona.
Las aplicaciones corporativas y la página web completan el rediseño con un enfoque coherente y funcional: papelería, señalética, flota y presencia digital se integran bajo una estética moderna, limpia y duradera.
El resultado es una identidad que proyecta confianza, estabilidad y compromiso ambiental, adaptada a un presente que mira hacia el futuro con los pies firmemente anclados en la tierra.